En verano nos echamos a la calle, comienzan las jornadas de playa o piscina, barbacoas y los momentos de refresco en las terracitas pasan a formar parte de nuestra rutina. Pero no somos los únicos a los que les encanta esta época del año. Seguramente, habrás detectado que la presencia de insectos se multiplica y una especie, que nos asusta especialmente, son las avispas. Existe un motivo para que susciten semejante pavor y es que su picadura es realmente dolorosa. Como una de las empresas de control de plagas en Valencia te contamos algunas curiosidades sobres estos bichejos que quizá no sepas.
Como las personas, no todos los ejemplares de avispa son iguales, de hecho cuentan con su propia personalidad. Pueden ser de dos tipos en función de su comportamiento: avispas solitarias o sociales. Casi todas las especies de este insecto pertenecen al primer grupo, es decir, se caracterizan por no dejarse ver. Mientras que las avispas sociales son aquellas que se acercan a nosotros y nos hacen quedarnos tensos o salir corriendo, algunas de las especies sociales pueden ser muy peligrosas.
Aunque se parecen en la forma y los colores, lo cierto es que las avispas difieren bastante de sus primas las abejas. Ambas especies construyen nidos donde vivir, las abejas con cera y las avispas con fibras de madera. La principal diferencia entre ambos animales se encuentra en su abdomen, mientras el de las avispas es estrecho y puntiagudo, el de las abejas es más ancho y corto.
Otra gran diferencia, entre estas especies tan parecidas, es que la abeja al picar se desgarra todos sus órganos y como consecuencia muere. Sin embargo, la avispa puede picar varias veces a una misma víctima y eso las hace aún más peligrosas. Como ocurre con las mosquitos, sólo las hembras tienen la capacidad de picar, el aguijón son sus órganos genitales.
Aunque nos asustan y pueden anidar cerca de nuestra casa o en nuestra propiedad, lo cierto es que la mayoría de las avispas no suponen un riego para el hombre. Sin embargo, juegan un papel fundamental en el control biológico de otros insectos, que sí son una verdadera plaga. Sobre todo se alimentan de insectos que pueden echar a perder los cultivos. Su papel en el ecosistema va más allá, pues ellas son fuente de alimento de otros animales, como las aves.
En Ecoambiente Sanidad Ambiental sabemos la importancia que tiene acabar con un avispero en una propiedad privada, sobre todo cuando en ella habita una persona que pueda ser alérgica a su veneno, niños o ancianos. No obstante, se trata de una especie protegida y que juega un papel fundamental en la biodiversidad del planeta.