Cuando los conductos de ventilación no se limpian de forma periódica y correctamente, pueden llegar a acumular todo tipo de microorganismos y bacterias que pueden ser perjudiciales para la salud. Tener un aire acondicionado en mal estado supone la aparición de enfermedades relacionadas con fiebres, jaquecas, alergias, etc., y una de las que más preocupan es la legionelosis. Como especialistas en desinfección de Legionella en Valencia, somos conscientes de los daños que puede causar esta bacteria que aparece fácilmente en los sistemas de aire acondicionado que están descuidados.
Contrata a profesionales para desinfectar los conductos de aire acondicionado
¿Por qué es importante contratar a profesionales para desinfectar los conductos de ventilación? Hay que tener en cuenta todo lo que afecta a la calidad del aire en el interior de los edificios, y de las deficiencias que pueden surgir como consecuencia de una inadecuada limpieza del sistema de aire acondicionado:
- Una mala ventilación: el aire no se filtra como debería al no llevar a cabo una limpieza y mantenimiento adecuados.
- Contaminación en el interior: el trabajo, las personas, el uso incorrecto de productos químicos, o la contaminación cruzada de otras zonas poco ventiladas, entre otras cosas.
- Contaminación exterior: gases de calderas, aire contaminado que se desecha al exterior y vuelve a entrar de nuevo por las tomas de aire acondicionado, etc.
A raíz de todo esto y de la ignorancia muchas veces de tener que llevar a cabo un mantenimiento profesional de los conductos de aire acondicionado, hay riesgos de infecciones o contagios por virus, bacterias y hongos como la Legionella. Entre los problemas que nos encontramos más frecuentemente en Ecoambiente, como profesionales del sector, están los siguientes:
- Infecciones y contagios de todo tipo, especialmente en ancianos, niños, personas con inmuno-depresión o asmáticos.
- Alergias: malestar general, dolores de cabeza, estornudos, etc.
- Legionelosis: muchas instalaciones no respetan las normas establecidas en el Real Decreto 865/2003, sobre los criterios higiénico-sanitarios para prevenir y controlar la legionelosis. Esto significa que no llevan a cabo las tareas preventivas necesarias de desinfección y control que evitan la aparición de nuevos brotes.